Texto y foto: Pedro Alonso / @pedroalonso7
¿Qué ocurrirá en los próximos años en el mundo del periodismo? ¿Van a desaparecer los medios tradicionales tal y como los conocemos hoy en día? ¿Cambiarán los valores? Todas estas duras aún sin resolver se las imaginó el pasado miércoles, Ramón Salaverría, con motivo de su conferencia titulada “El periodismo en la internet de las cosas” y que ofreció en la Facultad de Filosofía y Letras.
Salaverría, especializado en la investigación sobre el ciberperiodismo y los medios digitales, analizó lo que puede terminar ocurriendo con la implantación de las nuevas innovaciones, tanto tecnológicas como narrativas. “Van a desaparecer los trabajos humanos y muchos de los medios de comunicación serán suplidos por otras técnicas”, comenzó. “Hay que asimilar las nuevas tecnologías pero sin olvidar lo anterior”, recordó.
Según el periodista burgalés, profesor titular de Periodismo en la Universidad de Navarra, el futuro del periodismo estará gestado por dos innovaciones, una la tecnológica y otra la narrativa. Desde el punto de vista tecnológica, la información se basará en la “omniconectividad” y en la “ubicuidad de las pantallas”. Actualmente consumimos información a través de numerosos dispositivos móviles “que llevamos en los bolsillos y nos rodean por todas partes”, explicó. “Vivimos rodeados de pantallas. Estamos embebidos en la nueva tecnología que nos consume constantemente el tiempo”, prosiguió.
Para Salaverría, la información de la que nos nutrimos en pleno siglo XXI, nos la aportan otro tipo de dispositivos, lo que ha denominado “la internet de las cosas (IOT)”. “Es una interconexión digital con Internet de objetos cotidianos, no solo ordenadores”, la definió. “Estos objetos pasan a ser emisores y receptores de información y a través de una serie de patrones facilitan intereses, gustos y preferencias a los nuevos usuarios”, lo que ayudará a los medios de comunicación a saber qué tipo de noticias le interesa al público.
Aunque existe un peligro para estos nuevos consumidores de información y esta nueva forma de desarrollar el periodismo basada en la robotización de los datos, como comenta el periodista burgalés: “Lo malo no es que los robots escriban como periodistas, sino que los periodistas lo hagan como robots”. ¿Qué ocurrirá cuando se combinen lo tecnológico y lo narrativo? Salaverría lo tiene claro. En primer lugar, “el lenguaje periodístico va a evolucionar” sobre todo por la actualización continua de noticias y que hace que estemos rodeados de información las 24 horas. En segundo lugar, “la información será abierta”, lo que se traducirá en la asociación entre periodistas, público y sensores.
El futuro de los medios se centrará en una amplia renovación de los procesos editoriales, en la sustitución del concepto que conocemos de periodista por nuevos perfiles profesionales y en un cambio de los medios de comunicación y de los modos de comunicación. Pero la gran pregunta que Salaverría se plantea es… ¿cambiarán también los valores?